La teoría del conocimiento apareció en su momento como la base necesaria de toda filosofía y la raíz de la que nacían las otras ramas de la ciencia. Esta teoría perdió tal posición dominante pero se volvió a plantear la misma problemática, resurgiendo con la denominación de "teoría de la ciencia" o "epistemología". Pero la "teoría de la ciencia" como tal no puede responder por sí misma a todos los problemas que plantea el conocimiento humano. Bollnow se propone justamente examinar el trasfondo último que acompaña a todo conocer. Para ello es necesario repensar los conceptos básicos y cotejarlos con las nuevas ideas aportadas por diversas corrientes filosóficas y por los descubrimientos científicos, sobre todo los obtenidos en la psicología, la sociología y la antropología. Inspirado en Heidegger y Dilthey, Bollnow cree necesario admitir que todo conocer tiene su origen en un mundo de preconceptos que como tales constituyen la trama inicial en la cual se incluirán los hechos nuevos y las experiencias, poniendo en movimiento una crítica que dará a luz a nuevas verdades, más conscientes y controladas.